“Usar menos energía manteniendo la calidad de vida, es posible. Se logra realizando las inversiones tecnológicas necesarias y asumiendo las normas de conducta adecuadas”. Una de las frases destacadas en las charlas brindadas por el Departamento Intendencia sobre Uso eficiente de la energía en el IAFAS –en septiembre pasado-, resume el camino que, desde hace más de una década, transita el Instituto, aportando su granito de arena en el marco del cuidado del medioambiente. No es una consigna vacía o una moda. Es un estilo de gestión que tiene diversas vertientes y ya exhibe ricos resultados.
Entre las primeras acciones amigables con el medioambiente, se puede mencionar la digitalización de ciertos trámites y la implementación de sistemas informáticos que permitieron reducir el consumo de papel; y, fundamentalmente, la creación y puesta en funcionamiento de la Biblioteca Virtual, donde se archivan las resoluciones y disposiciones del Directorio del IAFAS y que puede ser consultada a través de la Intranet sin necesidad de impresiones. Asimismo, el reemplazo de luminarias tradicionales por versiones de bajo consumo y la colocación de timers en ciertos equipos.
Esas primeras medidas “eco-friendly” se mantienen en vigencia y conviven con nuevas prácticas que, a días del Día Mundial del Ahorro de Energía –el próximo 21 de octubre-, vale la pena describir:
USO RACIONAL DEL PAPEL Y DESPAPELIZACIÓN
Tal como describe el Balance Social 2017, el IAFAS mantiene hace años una tendencia de reducción cuantitativa del uso de papel:
Año 2015: Se consumieron 3.213 resmas;
Año 2016: Se consumieron 2.708 resmas (16% menos que el año anterior);
Año 2017: Se consumieron 2.111 resmas (22% menos que el año anterior).
Desde febrero pasado, el IAFAS está adherido al Programa de Despapelización de la Secretaría de Modernización de Entre Ríos, el cual fomenta la despapelización con el propósito de lograr beneficios tales como la optimización del espacio físico ocupado para almacenar la documentación histórica generada, la dinamización de los procedimientos administrativos y el cuidado del ambiente a través de un uso responsable del recurso del papel.
En los siete meses a partir de su incorporación al programa, el IAFAS donó 6.790 kilos de papel, una cantidad que posiciona al Instituto como uno de los organismos más comprometidos con el objetivo del proyecto.
En el Programa de Despapelización, el Instituto representa a la ONG Suma de Voluntades, la cual sustenta tres comedores infantiles, brinda apoyo escolar y alfabetización para adultos; realiza recorridas nocturnas diarias para ofrecer alimentación a personas en situación de calle; ofrece talleres educativos, clínicas deportivas y lleva adelante el proyecto Construir Dignidad, mediante el cual las familias construyen sus casas desde la fabricación misma de los bloques.
Por otra parte pero también bajo el propósito de reducir el uso de papel, IAFAS está trabajando para la implementación de la firma digital en resoluciones, disposiciones y demás documentos oficiales; un proyecto que, en Entre Ríos, es impulsado por Modernización del Estado. La firma digital, a través de un procedimiento matemático y con el respaldo de la Oficina Nacional de Tecnologías de Información, ofrece mayor seguridad que la modalidad tradicional.
USO EFICIENTE DE LA ENERGÍA
En el marco de su plan de políticas de gestión, IAFAS está trabajando por la consecución de la norma internacional ISO 50.001 de Sistemas de Gestión de la Energía, entendiendo que su aplicación contribuye al uso eficiente de la energía, a mejorar la competitividad y a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Entre las tareas que se vienen realizando en el Instituto con el fin de eficientar el uso de energía, se puede mencionar el reemplazo paulatino de fluorescentes por luminarias de bajo consumo, procurando no afectar la calidad de la luz en los lugares de trabajo; la colocación de sensores de movimiento para controlar la iluminación en los pasillos de IAFAS Central; y la instalación de relojes para temporizar el apagado en horarios no laborales de determinados equipos, como los extractores de aire y dispensers de agua. Sólo este último punto, el apagado de los dispensers de agua fría/caliente en los horarios en los que no hay personal en el Instituto, significa un ahorro mensual superior a los 1.556 kw.
En cuanto al sistema de aire acondicionado central del nuevo edificio, el mismo funciona de manera inteligente y ecológica, con tecnología de punta. Esto permite un ajuste automático en función de la información que toman los sensores, el caudal y temperatura necesarios en cada sector de acuerdo a mayor-menor temperatura por asoleamiento o carga.
Los acondicionadores de aire del viejo edificio, por su parte, deben estar seteados en 24° en verano según norma interna del Instituto. Asimismo, para futuros reemplazos, se establecerá la normativa para que se adquieran exclusivamente equipos con etiquetado de eficiencia energética.
Teniendo en cuenta que estas acciones deben complementarse con conductas amigables con el medioambiente de parte de las personas de la organización, el Departamento Intendencia realizó cuatro exposiciones tituladas Uso eficiente de la energía en el IAFAS, para la capacitación y toma de conciencia de todos los empleados del Instituto.